Contar con infraestructura adecuada dentro de los planteles educativos es uno de los principales alicientes para que el alumnado destaque.
El Instituto Tecnológico Superior de Cajeme (ITESCA) extensión Vícam, es una universidad de suma importancia en las comunidades yaquis, ya que es una opción de estudio para miles de habitantes de los poblados aledaños y quienes no pueden mudarse de ciudad para continuar con su educación superior.
Dicha institución se mantenía en operación, pero con gran oportunidad de realizar mejoras en muchas de sus áreas, estas rehabilitaciones fueron posible gracias al Fondo del Fideicomiso del Gasoducto y a la gestión llevada a cabo por Fundación IEnova quien identificó e hizo lo correspondiente para ver realizadas dichas obras.
Maribel Alvarado Valdez, coordinadora de esa universidad, explicó que los trabajos de rehabilitación que se realizaron en varios espacios como salones, baños, patio y canchas deportivas, derivaron en la creación de un plantel más adecuado y funcional.
”A nombre del director General de ITESCA, el maestro Gabriel Baldenebro Patrón, agradecemos enormemente por este apoyo, ya que contar con estas mejoras ha beneficiado a los alumnos, pero también a los maestros y todo el personal”, resaltó.
El contar con aulas con equipos de proyección, manifestó, ha permitido que los maestros puedan impartir sus clases de manera más dinámica y que esto atraiga más la atención de quienes cursan las materias.
Resaltó que los arreglos en el patio y cancha se tradujeron en la creación de un lugar para eventos y en la posibilidad de recibir a otras instituciones de educación de invitados para encuentros deportivos y culturales.
Destacó que por los trabajos que la Fundación realizó en la universidad, está se colocó a la altura de cualquier otra de su tipo.
Los apoyos brindados tienen la finalidad de ofrecer un mejor espacio para los cientos de alumnos que acuden a clases durante el ciclo escolar y son el resultado de los acuerdos de la consulta del proyecto Gasoducto.